Puede darse el caso de que aneja a tu finca exista otra de otro propietario y que por motivos de mejora, os convenga unirlas.
Este modelo de unir fincas se ha llevado a cabo en la mayor parte de los países europeos, en los que básicamente por motivos históricos, las propiedades se han dividido por herencia y han generado un fraccionamiento excesivo de las grandes parcelas.
Este es el fin de lo que se denomina Concentración parcelaria. Mejorar la estructura de las parcelas agrícolas, para aumentar su tamaño, hacer más fácil el acceso, mantenimiento y labor, lo que la dotará mayor eficiencia y productividad, sobre todo cuando nos estamos refiriendo a la actividad agrícola.
Por tanto está dirigida a constituir y mantener una explotación de estructura y superficie adecuadas para conseguir más beneficios, sobre todo en un uso agrícola, pero también, ganadero o forestal, Se trata de conseguir una mejora de las condiciones de explotación de las fincas incluidas.
Este proceso se lleva a cabo principalmente en áreas rurales donde la propiedad de la tierra está fragmentada en pequeñas parcelas dispersas, lo que dificulta la gestión eficiente de la tierra y el uso de maquinaria agrícola moderna. La concentración parcelaria busca solucionar estos problemas mediante la redistribución de la tierra entre los propietarios afectados y la redefinición de los límites de las parcelas.
Los beneficios de la concentración parcelaria
1. Facilita la mecanización agrícola: Al crear parcelas más grandes y regulares, se facilita el acceso de maquinaria agrícola moderna, lo que puede aumentar la eficiencia y la productividad de las explotaciones agrícolas.
2. Mejora la gestión de la tierra. Puede facilitar la gestión y el mantenimiento de la tierra, ya que reduce la complejidad asociada con la administración de múltiples parcelas dispersas.
3. Fomenta la modernización agrícola: Al permitir un acceso más fácil a la maquinaria agrícola moderna y mejorar la gestión de la tierra, puede fomentar la adopción de prácticas agrícolas más eficientes y sostenibles.
4. Incrementa la rentabilidad: Al aumentar la eficiencia y la productividad de las explotaciones agrícolas, la concentración parcelaria puede contribuir a mejorar la rentabilidad de los agricultores.
El procedimiento de concentración parcelaria puede darse a iniciativa de los propietarios, de entidades locales o de la Administración por motivos de interés público.
Pasos a seguir para juntar tu finca
- Se precisa un Estudio Preliminar para evaluar la viabilidad de la concentración parcelaria, que deberá incluir aspectos técnicos, económicos, sociales y ambientales. Una vez aprobado se pasa a la declaración de utilidad pública y se aprueba el Proyecto.
- Hay que establecer una Comisión Local de Concentración Parcelaria, de la que forman parte los propietarios, la Administración y expertos técnicos.
- Es obligatorio un Levantamiento Topográfico y Catastral de las parcelas para saber la situación real de las propiedades.
- Proyecto de Concentración Parcelaria en el que se indica la nueva distribución de las parcelas y las necesarias como por ejemplo caminos.
- Exposición Pública y Alegaciones. Las bases provisionales serán aprobadas por la comisión local de concentración parcelaria y se expondrán públicamente durante un mes en los tablones de anuncios de las entidades locales. Es durante este período de tiempo cuando se pueden presentar alegaciones.
- Bases Definitivas. Solventadas las posibles alegaciones y las modificaciones que puedan generar, el Proyecto se aprueba y pasaría a ejecutarse reasignando las parcelas y construyendo las infraestructuras. Estas bases también se expondrán públicamente por el plazo de un mes.
- Con el Proyecto de reordenación parcelaria (que también se expondrá públicamente durante un mes), se procederá a la entrega de las nuevas parcelas.
Nueva reorganización
Para la nueva reorganización, se ha de garantizar que el valor y utilidad de las nuevas parcelas es equivalente al de las parcelas originales.
La calidad de la tierra de la finca adjudicada dependerá de la calidad de la tierra de las parcelas aportadas por los propietarios, debiendo ser equivalente. Lo normal es que exista una equivalencia entre lo que aporta y lo que reciba.
Además, se actualizan los registros catastrales y de propiedad.
A través del SIGPAC (Sistema de Información Geográfica de Parcelas Agrícolas), podremos identificar geográficamente las parcelas declaradas por los agricultores y ganaderos incluidas las concentraciones parcelarias.
Los propietarios de las fincas tendrán derecho a presentar recursos y reclamaciones si consideran que sus derechos han sido vulnerados o que la equivalencia no se ha respetado adecuadamente.
Estos recursos suelen consistir en reclamaciones por diferencias de superficie, impugnaciones por defectos en el procedimiento o por no estar conforme con el valor de las nuevas fincas.
Independientemente de lo dicho, a día de hoy, la concentración parcelaria sigue siendo objeto de problemas, bien por la propia legislación bien por la aparición de nuevas normas.
Es importante destacar que puede ser un proceso complejo que involucra la participación y el acuerdo de múltiples partes interesadas, incluidos los propietarios de tierras, las autoridades locales y los agricultores. Además, se deben considerar los aspectos legales, ambientales y sociales durante todo el proceso.
