Singular
finca forestal de 550 hectáreas situada a pocos kilómetros del
Parque Natural de Cazorla. Dispone de una antigua y gran cortijada de
la Orden de Santiago, con nacimiento y sondeo de agua legalizados.
Paisaje
de enorme diversidad entre dehesa y pinar maderable, con cotas entre
1600 y los 1800 metros, con caza abundante, predominando la cabra
montés, ciervo, gamo y jabalí así como la perdiz roja, paloma
torcaz y tórtola, entre otros.
Los
pastizales son aprovechados por el ganado de oveja merina, con su
propia denominación de origen.
Grandes
posibilidades turísticas al encontrarse a 120 km de Murcia,
accediendo a todo el Levante de donde proviene la mayor parte de los
visitantes.
Todos
los caminos internos son privados y están cerrados.
Aprovechamiento
actual cinegético, ganadero, pinar maderable y biomasa. Superficie
ampliable con fincas colindantes.